Qué ver en Ses Salines, Mallorca

 


Ses Salines se halla entre los términos municipales de Campos y Santanyí. Toma el nombre de las milenarias salinas que explotaban los romanos. Actualmente reducidas y con poca actividad, las salinas de sa Vall, fueron muy importantes en el pasado.


Tiene como nucleo turístico la Colonia de Sant Jordi. Surgió de un primitivo puerto de pescadores y actualmente está mas poblado que Ses Salines.


El pueblo se caracteriza por sus acogedores bares y restaurantes donde los lugareños y los veraneantes disfrutan de su café con leche al sol. 


También son de interés histórico los talaiots, restos de antiguos asentamientos. Una multitud de pequeñas calas de baño como Cala Llombards o la playa natural de ensueño Es Trenc se encuentran a pocos minutos en coche. 


También no puede perderse el visitar el Faro del Cap Salines donde podemos contemplar unas preciosas vistas de la Isla de Cabrera que se encuentra a muy poca distancia y a la que podemos acceder en barco desde la Colònia de Sant Jordi, disfrutando de la mejor puesta de sol de Mallorca.




El hermoso y llano paisaje también se puede explorar fácilmente en bicicleta. No sólo entre los lugareños, sino también entre los residentes extranjeros y los turistas, son muy populares los dos restaurantes Cassai y Casa Manolo, una verdadera institución en Ses Salines.


Las playas de la Colonia de Sant Jordi, es Dolç i es Carbó, son los principales atractivos de su litoral. Su limpieza y el color blanquinoso de la arena hacen que sean muy apreciadas.


En el término se han localizado tres necrópolis romanas: n´Amera, sa Pleta Gran y es Sebal.linar. El parque botánico Botanicactus, cuenta con una excelente colección de cactus y árboles mediterráneos.


El islote de na Guardis, preside la Colonia de Sant Jordi, es un enclave con restos de una importante factoria púnico-ebusitana que era punto de intercanbio entre los cartagineses y sus pobladores.


Ses Salines se encuentra a 10 km de Santanyí



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